Evolución de nuevas tecnologías
La aplicación de las tecnologías en el sector turístico ha tenido una evolución acorde con las etapas de informatización e internacionalización de la sociedad,
y la industria turística intensiva en información utiliza la informática en una primera fase (años 60 y 70) para automatizar la gestión de los procesos de datos que requerían de un gran volumen de mano de obra. La aparición de los microprocesadores y del ordenador personal a partir de los años 80, además de facilitar la gestión crea la base de millones de usuarios que en una tercera etapa, la de la conectividad, pueden convertirse en consumidores y clientes potenciales.
A partir de los años 90 cabe destacar a Internet como elemento revolucionario. En escaso tiempo Internet se ha hecho imprescindible en cualquier empresa, con independencia de su tamaño, y tal ha sido su influencia, que la mayor parte de los hogares españoles lo utiliza constantemente. Ya se empiezan a ver muchos casos de empresas en las que los conceptos tradicionales desaparecen a consecuencia de Internet y que operan en Internet con un ámbito de operaciones mundial.Ese desarrollo tecnológico – Internet, comunicaciones, móviles, banda ancha, satélites, etc. – está produciendo cambios significativos en la estructura económica y social, y en el conjunto de las relaciones sociales.
La expansión de redes informáticas ha hecho posible la universalización de los intercambios y relaciones, al poner en comunicación a amplios sectores de ciudadanos residentes en espacios geográficos muy distantes entre sí. Los espacios nacionales se han visto superados por las tecnologías de las información que tienen fronteras: informaciones políticas, militares, económicas – especialmente financieras – sociales, empresariales, etc. se intercambian y se transmiten cada día por todo el mundo, de manera que nuestra vida está condicionada en cada momento por lo que está sucediendo a miles de kilómetros de distancia.
La aplicación de las tecnologías en el sector turístico ha tenido una evolución acorde con las etapas de informatización e internacionalización de la sociedad,
y la industria turística intensiva en información utiliza la informática en una primera fase (años 60 y 70) para automatizar la gestión de los procesos de datos que requerían de un gran volumen de mano de obra. La aparición de los microprocesadores y del ordenador personal a partir de los años 80, además de facilitar la gestión crea la base de millones de usuarios que en una tercera etapa, la de la conectividad, pueden convertirse en consumidores y clientes potenciales.
A partir de los años 90 cabe destacar a Internet como elemento revolucionario. En escaso tiempo Internet se ha hecho imprescindible en cualquier empresa, con independencia de su tamaño, y tal ha sido su influencia, que la mayor parte de los hogares españoles lo utiliza constantemente. Ya se empiezan a ver muchos casos de empresas en las que los conceptos tradicionales desaparecen a consecuencia de Internet y que operan en Internet con un ámbito de operaciones mundial.Ese desarrollo tecnológico – Internet, comunicaciones, móviles, banda ancha, satélites, etc. – está produciendo cambios significativos en la estructura económica y social, y en el conjunto de las relaciones sociales.
La expansión de redes informáticas ha hecho posible la universalización de los intercambios y relaciones, al poner en comunicación a amplios sectores de ciudadanos residentes en espacios geográficos muy distantes entre sí. Los espacios nacionales se han visto superados por las tecnologías de las información que tienen fronteras: informaciones políticas, militares, económicas – especialmente financieras – sociales, empresariales, etc. se intercambian y se transmiten cada día por todo el mundo, de manera que nuestra vida está condicionada en cada momento por lo que está sucediendo a miles de kilómetros de distancia.
Elige destinos famosos por su patrimonio cultural para visitarlo
una vez en la vida y con pocas intenciones de repetir. Suele viajar
en grupos organizados con visitas en ruta a varias ciudades, sin una
estancia prolongada en ninguna de ellas. Es el segmento de visitantes
más abundante en las ciudades históricas y lo más parecido a
turismo de masas por su forma de comercialización, comportamiento y
consumo.
Turista atraído por la cultura:Pasa sus
vacaciones en un destino no cultural, como la playa o la montaña,
pero no le importa, de forma ocasional, visitar lugares históricos y
aprovechar las oportunidades culturales disponibles como: ciudades,
fiestas locales, museos, sitios arqueológicos. Es una forma de
turismo creciente y en toda la región tiene un ejemplo claro en los
veraneantes extranjeros de la Costa visitan la Ciudad
Turista de motivación cultural:Elige los lugares
que visita en función de la oferta cultural que ofrecen. Está
altamente motivado por aprender y prepara su viaje con antelación,
informándose de lo que quiere ver. Pasa varios días en la ciudad o
región elegida y realiza desplazamientos de corta duración por el
entorno inmediato. Este tipo de turista ya sea Nacional o extranjero,
suele ser residente en una metrópolis o gran ciudad, de mediana
edad, de considerable nivel educativo, medio o alto nivel adquisitivo
y que viaja con asiduidad. En los países occidentales cada vez son
más las personas adultas con tiempo libre, buena salud, que
disfrutan viajando y perciben la visita a ciudades culturales como
una experiencia de ocio por la que están dispuestos a pagar.